martes, 19 de febrero de 2008

ASAMBLEA VIVIENDA DIGNA LEON



sede CCAN, 20/2/08 a las 20:30

ACUDE Y PARTICIPA

lunes, 18 de febrero de 2008

Entre la espada de la Cope y la pared de Prisa


Después de la manipulación informativa de los años de Aznar, Zapatero llegaba a la Moncloa con la promesa de cambiar el tradicional servilismo de los medios públicos al poder. Pero la operación ‘Bonsai’ sobre RTVE (precarización de personal y reducción de plantilla), dejó al ente público bastante lejos de convertirse en un servicio de calidad. En los medios privados, las sorpresas llegaron por la ruptura del tradicional idilio entre Prisa y PSOE y por la beligerancia casi obsesiva de la derecha mediática, con una alucinante teoría de la conspiración sobre el 11-M como punta de lanza. Y, mientras tanto, la telebasura y el corazón siguieron reinando en el “prime time”.

La acción del Gobierno ha trastocado el panorama mediático y ha provocado la irrupción de nuevos actores. Compitiendo con Prisa en un asunto estratégico, los derechos del fútbol, Mediapro sale a la luz pública aupado por Zapatero. El nuevo fenómeno de la TDT y la proliferación de canales nacionales, autonómicos y locales, pone sobre la mesa a otros actores del ámbito ultraderechista: Libertad Digital e Intereconomía en él recogen lo sembrado a nivel autonómico y local allá donde gobierna el PP. Lo que no cambia es que los favores se pagan.

LOS REGALOS DEL GOBIERNO
La actuación pública de Zapatero

La legislatura comenzó con el consejo de sabios, un grupo de expertos que debía decidir sobre el futuro de los medios públicos nacionales. El compromiso presidencial de respeto a sus decisiones, se vio roto por la urgencia de no aumentar la deuda del ente y por no perjudicar los intereses privados. RTVE se reduce dejando la plantilla a la mitad y se instala la precariedad en los nuevos contratos. El ente pasa a ser corporación y se nombra presidente a Luis Fernández (un hombre de Mediapro y ex de Prisa) en un extraño consenso parlamentario entre PP y PSOE. La nueva plantilla se centrará en los informativos que tienen a Lorenzo Milá como responsable mientras se ceden los centros territoriales para uso de la productora de España directo: Mediapro, quien también realiza 59 segundos y Tengo una pregunta para usted y consigue la gestión del Canal 24 Horas y del Canal Internacional.

La otra gran actuación del Gobierno es la concesión de dos nuevas licencias nacionales en abierto para La Sexta (Mediapro) y Cuatro (Prisa). El fin de la legislatura está marcado por el apagón analógico y la implantación de la TDT que se concreta en concesiones a los tradicionales operadores privados, la irrupción del empresariado del ladrillo en el panorama local y regional y la consolidación de nuevas iniciativas ultraconservadoras en televisión junto con un gran grupo de “izquierdas” con la cabecera de Público.

FAVORES Y AGRAVIOS
La influencia del Gobierno en el mercado

Las concesiones a Cuatro y a La Sexta han situando a sus grupos en un enfrentamiento en el terreno de la “mal llamada guerra del fútbol”. Las nuevas concesiones no estuvieron exentas de polémica entre PP y PSOE por amiguismo. Pero la gran polémica se ha producido por la ruptura del statu quo en torno a los derechos del fútbol. Prisa acusa veladamente al Gobierno de favorecer a Mediapro, que en una maniobra comercial de gran envergadura se lleva los derechos que la operadora de satélite tenía. Esa guerra de grandes vuelos tiene al fútbol, y las grandes audiencias como campo de batalla, y la TDT y el satélite como los frentes en liza. Mediapro surge de un entramado de empresas vinculadas a la publicidad, los servicios técnicos y las productoras privadas como un nuevo gigante mediático. Se queda con el control de La Sexta, sin ser accionista mayoritario, y crea el diario Público, aunque la deuda acumulada sea desorbitada.

Los responsables de Mediapro y los de RTVE están muy cerca de ZP. El caso más conocido es el de Miguel Barroso, socio de José Miguel Contreras, consejero delegado de La Sexta, quien durante su secretaría de Estado de Comunicación en 2005 se encargaría de la Ley de Medidas Urgentes para el Impulso de la Televisión Digital Terrestre, a raíz de la cual se justifica la adjudicación de La Sexta.

GRIETAS EN EL IMPERIO PRISA
Años revueltos para el aliado del PSOE

Murió Polanco. El 21 de julio de 2007, fallecía el que fue el líder indiscutible de Promotora de Informaciones S.A. Fue el signo más visible de los muchos cambios vividos en el imperio a lo largo de estos cuatro años.

En su trato con el Gobierno, en la idílica relación Prisa-PSOE (en la que históricamente cuesta saber quién manda sobre quién) comenzaron a aparecer las primeras grietas. El escaso apoyo a las aventuras de ZP (ya fuera en la reforma de los estatutos o en el proceso de paz) se vio respondida con los nuevos amigos que Moncloa encontró en Mediapro. Y con estas posturas, Prisa tampoco tuvo las simpatías del PP, que proclamó un boicot al grupo después de que en uno de sus últimos discursos Polanco reclamara un partido de derechas “moderno y laico”.

En el buque insignia, El País, el conflicto entre información e intereses económicos se vio en toda clase de aspectos. Ya fueran literarios (como mostró en 2004 la expulsión del crítico Ignacio Echevarría tras la feroz reseña de una novela de Bernardo Atxaga editada por Alfaguara), hasta la información internacional (con la demonización de los gobiernos de Venezuela o Bolivia, dadas las inversiones en la zona). En un progresivo giro a la derecha, los editoriales del periódico llegaron a dar defensas de la monarquía que superarían a las de ABC o comparaciones entre el Che Guevara y el terrorismo yihadista, lo que hasta provocó una revuelta en la redacción. Algunos periodistas no aguantaron más, como Ernesto Ekaizer, un hombre de la casa que acabó por pasarse a Público.

LA CONSPIRACIÓN DE PEDRO J.
‘El Mundo’, la COPE y los agujeros negros.

Pero si El País se escoró a la derecha, cuesta pensar hasta dónde se echaron medios como la COPE o El Mundo. Dentro de la campaña de demolición que emprendió la derecha política a lo largo de la legislatura, sus terminales mediáticas se encargaron de difundir la mayor cantidad de miedo y odio posible. El tema estrella fue la teoría de la conspiración, una singular versión sobre el 11-M que según el día podía apuntar a ETA, a la Guardia Civil, al servicio secreto o a Marruecos. La negativa de ABC y Vocento a sumarse a este club dio lugar a una virulenta batalla entre medios conservadores. Aún así, la teoría reportó un aumento de la audiencia e importantes ingresos. La legislatura será además recordada por el estrellato de Jiménez Losantos, un locutor que, con un estilo semejante al de la Radio Mil Colinas (la que animó al genocidio tutsi en Ruanda) se convirtió en el referente de la derecha, lo que le convirtió, paradójicamente, en el periodista más beneficiado con el Gobierno de ZP.

Fuente: diagonal.net / César Gabriel y Miguel Ángel de Lucas

domingo, 17 de febrero de 2008

Pasos adelante y pasos atrás en educación

Francisco Javier Esperanza


(El profesor de secundaria, y coordinador de TEE-REDES, analiza la ocasión perdida durante estos cuatro años para lograr un proyecto educativo integrador y que no cambie en la próxima legislatura.La falta de iniciativa política en los asuntos relacionados con la Educación han caracterizado la legislatura que ahora termina, reflejo de las dos ministras que han ocupado el cargo. María Jesús San Segundo y Mercedes Cabrera se han caracterizado por tener un perfil mediobajo y por la falta de imaginación y de proyecto. Y como resultado, se ha ido a la zaga de los sectores más conservadores de la sociedad, a quienes les ha faltado de todo menos esa iniciativa que echamos de menos en los gobiernos del PSOE.)

Se comenzó la andadura con una acertada moratoria, y posterior derogación, de la triste Ley de Calidad de la Educación (LOCE ) que nunca llegó a aplicarse, pese a los conatos de algunos dirigentes autonómicos, como Esperanza Aguirre (presidenta de Madrid), de legislar de forma testimonial sobre las bases de la LOCE, en un intento más de vivir de espaldas a la legalidad y la legitimidad democrática que ha caracterizado al PP en esta legislatura.

La LOCE consagraba, en plena mayoría absoluta del PP, los sueños más rancios de la derecha española: segregación del alumnado en itinerarios, segundas y terceras vías para el alumnado de origen migrante, la cultura del esfuerzo, como solución a todos los problemas que nos aquejaban, etc. Esta paralización en su aplicación hizo, de alguna forma, concebir esperanzas de cambio que pronto se vieron defraudadas.

En efecto, la jerarquía católica vio motivos de alarma en la normalización tomada hacia la asignatura de religión católica despojándola, por tanto, de la equiparación con asignaturas significativas curricularmente. Este hecho insólito, concedido por el último Gobierno Aznar, envalentonó a los obispos y les hizo pensar en la vuelta al paraíso nacionalcatólico que no han dejado de reivindicar durante estos cuatro años de bronca y ‘lucha callejera’.

Tras arduas negociaciones (con importantes concesiones presupuestarias de por medio) el Gobierno pensó contar con la pax romana, pero se equivocó.

Ratzinger había considerado prioritaria la reconquista de los países católicos y España era, quizá, el primero en sus planes.

Así, otros artículos del primitivo proyecto de LOE fueron vaciándose de significado.

Quizá no se ha valorado lo suficiente la gran repercusión que está teniendo el abandono de la elección democrática de directores en los centros educativos. En efecto, la LOE abre la puerta a multitud de procesos que apuntan a la casi libre designación de directores por las distintas administraciones educativas. El resultado no se ha hecho esperar y hoy, mejor que nunca, se han sentido los efectos de direcciones de centros que no tienen que rendir cuentas a los claustros o consejos escolares, sino al dedo que los nombró.

Pero, a pesar de todo, no se ha conseguido un acuerdo de mínimos. El PP ya ha declarado su intención de modificar determinados aspectos de la LOE, si no de toda ella. Al final de la legislatura, nada hace presagiar un mínimo de estabilidad en el sistema educativo no universitario español atravesado por siete leyes desde 1990.

El Gobierno tampoco ha sabido o querido materializar una defensa de la educación pública y se ha dejado llevar por la corriente que dirige poco a poco al alumnado a los centros concertados, mayoritariamente religiosos, bajo la premisa de que lo público no funciona, funciona mal o está lleno de migrantes y otros indeseables. Se ha consolidado la tendencia a una concentración de autóctonos y migrantes de baja cualificación escolar en la red pública mientras la privada (subvencionada con fondos públicos) elige sus perfiles de alumnado para, a continuación, atribuirse los méritos de un éxito perfectamente previsible. Entre tanto la iglesia católica se asegura el control ideológico de los cuadros medios y altos de este sufrido país.

La asignatura de Educación para la Ciudadanía cayó también en manos de una derecha rancia que acusó al Gobierno de adoctrinamiento, olvidándose, por otro lado, de la religión católica en horario lectivo. Se negoció deprisa y mal con la Federación Española de Religiosos de la Enseñanza (FERE) de tal manera que en muchos centros privados religiosos dicha asignatura es, en la práctica, una Religión Católica II. A cambio se pretendió evitar un precio político con los votantes del PP que el PSOE parece dispuesto a pagar más gustosamente agraviando constantemente a sus votantes y a la izquierda en general.

Otra ausencia clamorosa en esta legislatura ha sido la reconducción de la Formación Profesional hacia posiciones más en consonancia con el lugar que ocupan en otros países y con las necesidades más objetivas de la formación en España. Desgraciadamente la FP es casi siempre una asignatura pendiente.

SÍ A LA LOU Y SÍ A BOLONIA

Estos años han servido para que el plan de Bolonia se conforme en una realidad en las universidades públicas españolas. Su implantación debe terminar en el año 2010 y ya se puede comprobar en algunos títulos, especialmente, de posgrado. Mientras, las licenciaturas, diplomaturas e ingenierías se han unificado en grados, todos ellos regidos por los creditos ECTS, y la incrementación de la financiación privada, ya sea mediante empresas o por el incremento de las cuotas de los estudiantes, becas-préstamos incluidas. En estos cuatro años, y en los anteriores las protestas contra el Informe Bricall, la LOU y, ahora, contra Bolonia no han desaparecido, aunque con altibajos, para intentar evitar este proceso de privatización y liberalización de la Universidad pública. La próxima cita será en diferentes universidades el próximo 6 de marzo.

Fuente: diagonal.net

sábado, 16 de febrero de 2008

Cuidar el medio ambiente queda bien como eslogan


A diferencia del PP, el PSOE no ha tenido ningún problema en asumir que la degradación medioambiental es un problema y que hay que proteger nuestro hábitat. Ha sabido desmarcarse del trasvase del Ebro (incluido en el Plan Hidrológico Nacional del PP), declararse antinuclear y abanderar la lucha contra el cambio climático. Pero a la hora de la verdad, de traducir las buenas palabras en políticas reales, Medio Ambiente ha seguido siendo el Ministerio ‘menor’ y las políticas medioambientales han estado supeditadas al crecimiento económico de la construcción y las grandes infraestructuras.

Del Ministerio de Medio Ambiente salieron muchas medidas y planes –pocas leyes– elaborados, seguramente, por personas competentes y que creen en lo que hacen. Pero como las recomendaciones que hace la ONU, todo, o casi todo, se queda en papel mojado. Muchas de las leyes y planes para proteger el entorno y nuestra salud que se han aprobado (Ley de calidad del Aire, Ley del Suelo, Planes de Movilidad, el Código Técnico de Edificación, etc.) dependen en su aplicación de las CC AA, lo que aumenta su arbitrariedad. Y los Ministerios con más fuerza, como Fomento e Industria (sólo hay que comparar las partidas presupuestarias de cada uno) cortocircuitan con sus planes estratégicos leyes y medidas de protección del entorno, como la Red Natura 2000. A continuación, un resumen sumario de las principales medidas.

TERRITORIO

En materia de gestión del territorio se han elaborado leyes que apuestan por la protección del entorno, como la Ley del Patrimonio Natural y Biodiversidad, mientras paralelamente se aprueban otras que persiguen sacar la mayor rentabilidad a costa de la destrucción del paisaje.

Se empezó con la retirada de Plan Hidrológico Nacional del Gobierno del PP, pero las políticas de urbanismo e infraestructuras que se han llevado a cabo quedan lejos de apostar por una nueva cultura del agua, que implica un cambio más profundo del modelo. Con una nueva Ley del Suelo que dice contrarrestar las tendencias especulativas, en realidad se está preparando el terreno para un nuevo boom inmobiliario a través del abaratamiento del suelo rústico. Se crean nuevas desaladoras para evitar la sobreexplotación de acuíferos y ríos, pero una gran parte de este agua es para cubrir servicios turísticos y nuevas urbanizaciones con campos de golf.

A principios de 2007 se aprobó la Ley de Calidad del Aire y Protección de la Atmósfera con el objetivo de adecuarse a las directivas europeas y garantizar a la población un aire menos nocivo, pero se pasó por alto un punto que calificaron como “un error”: no se contemplaban ni los yates ni los aviones para el nuevo modelo de impuestos (ahora basándose en las emisiones de CO2 en vez de en la cilindrada). Tampoco parece coherente esta preocupación por la calidad atmosférica mientras se aprueba el Plan Estratégico de Infraestructura y Transporte que plantea la construcción de 6.000 km más de autovías y 9.000 km nuevos para líneas de Trenes de Alta Velocidad. Este plan ha obtenido todo tipo de denuncias por parte de la sociedad civil que no entiende cómo las construcciones previstas (muy lejos de las necesidades reales) son la primera etapa de un plan que, a partir de 2013, busca conducir el transporte hacia la sostenibilidad. ENERGÍA Y CAMBIO CLIMÁTICO El Gobierno del PP nunca incluyó en su política nacional el problema del cambio climático, a pesar ratificar el Protocolo de Kioto en 2001 y comprometerse a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero un 15% respecto a 1990. Cuando el PSOE asumió la candidatura, las emisiones sobrepasaban el 45%. Lo tenía difícil, sí, y en cuatro años no se cambia un modelo de consumo y producción energética basado en el despilfarro y la dependencia de los hidrocarburos. Sin embargo, la preocupación que destilan sus discursos no se corresponde con las medidas adoptadas. Muchas son transposiciones de la directiva europea, con sus aciertos y sus coladeros. La entrada en vigor del mercado de comercio de emisiones europeo en 2005 ha exigido la elaboración de planes anuales donde se fijan los topes de contaminación a algunos de los sectores contaminantes. El Gobierno socialista no sólo ha aplicado sus rebajas en su segundo Plan (reducir las emisiones un 15% era demasiado y lo han dejado en un 24%), sino que ha sido muy benevolente con las empresas afectadas, especialmente con las eléctricas. Además de regalarles toneladas de derechos de contaminación gratuitos, les brinda todas las facilidades para cumplir Kioto sin dejar de contaminar. La herencia, por otra parte, de un mercado eléctrico liberalizado por el PP ha dejado a la discrecionalidad de las eléctricas (nacionales y extranjeras) la inversión en centenares de centrales térmicas por todo el territorio más allá de las necesidades energéticas. Conseguir que en 2010 el 12% de la energía primaria sea producida con fuentes renovables es insuficiente si sigue una política continuista del PP en el sector energético. Tampoco se ha regulado seriamente la contaminación del transporte (principal responsable del calentamiento global) ni el consumo energético residencial (ambos no incluidos en la directiva europea), pero el Código Técnico de Edificación es un paso adelante en eficiencia energética. Ha sido importante que la postura oficial no sea pronuclear. Pero si no se han construido más centrales nucleares ha sido porque no son rentables en un sector liberalizado. Otra cuestión es el cierre de las centrales existentes.

RESPONSABILIDAD AMBIENTAL

En marzo de 2007 se aprobó la Ley de Responsabilidad Ambiental (ver DIAGONAL nº 53) como respuesta al mandato constitucional según el cual la ciudadanía tiene derecho a disfrutar de un medio ambiente adecuado. Quienes lo impidan están obligados/as a reparar los daños causados (Art.45.3). “Quien contamina paga”, lo cual es todo un avance legislativo en términos ecológicos. Sin embargo, sólo se circunscribe al territorio español, un gran vacío que los grupos ecologistas han denunciado, ya que implica que la larga lista de transnacionales españolas que realizan sus actividades fuera del Estado quedan exentas de responsabilidades. Tampoco se considera la posible contaminación nuclear ni la que afecta a la atmósfera ni a las aguas marinas. Casos derivados de las actividades de defensa nacional o seguridad internacional, de traslado de residuos fuera de la UE, de contaminación por hidrocarburos o por transporte de sustancias nocivas o potencialmente peligrosas quedan también fuera de la legislación. Para el resto de casos, en los que se exigirán responsabilidades por ley, se reserva una cláusula que establece que la Administración podrá eximir del pago del agente contaminante cuando lo considere necesario.



Fuente: diagonal.net / Mar Soler y Soraya González

viernes, 15 de febrero de 2008

Un repaso a la sanidad

En primer lugar, hay que tener en cuenta que el Ministerio de Sanidad, tras el traspaso de competencias a las Comunidades (CC AA), tiene limitada su capacidad de intervención a la financiación (junto con el Ministerio de Hacienda). No obstante, apenas ha avanzado en temas de su competencia, como la planificación de recursos humanos. Multitud de médicos y enfermeras siguen emigrando a otros países desarrollados, pero se importa personal de países empobrecidos a los que se priva de sus escasos recursos. No se ha elaborado tampoco un Plan de Salud Integrado. Aunque ha mejorado la información sanitaria, ésta sigue siendo escasa, insuficiente y no discrimina los problemas y necesidades de salud por sexo o nivel socioeconómico.

El Gobierno de Zapatero ha mantenido el modelo de financiación existente con anterioridad por lo que siguen incrementándose las desigualdades entre CC AA. El Consejo Interterritorial de Salud (CIS) sigue siendo un escenario de confrontación política partidista, y las pocas decisiones consensuadas, como la incorporación de nuevas vacunas al calendario nacional, están orientadas por motivaciones políticas en lugar de por la racionalidad. El gasto farmacéutico continúa siendo, por otra parte, muy elevado (aunque se ha moderado su crecimiento al 7% anual), dado que el Gobierno no ha sido capaz de controlar la presión de la industria farmacéutica.

Continúa el avance de la privatización sanitaria en las CC AA gobernadas por las fuerzas conservadoras, como Valencia (Alzira y La Ribera), Madrid, con nueve nuevos hospitales con iniciativa de financiación privada, o La Rioja, con la privatización de los servicios de radiología. Incluso en las comunidades de gobierno progresista, como Andalucía, la situación es contradictoria.

Un logro en este sentido es el cierre de las fundaciones sanitarias de gestión privada en Galicia. Entre los logros de esta legislatura, podríamos citar el acuerdo sobre estrategias para mejorar la Atención Primaria (AP 21), aunque existe un desarrollo escaso y desigual del mismo en las diferentes comunidades. Finalmente podemos decir que ha habido avances en salud pública (tabaquismo, obesidad, prevención de accidentes de tráfico). También ha mejorado la asistencia a la mujer, con la atención al parto y la disminución de cesáreas y episiotomías, pero se ha cedido a las presiones de la Iglesia al no desarrollar la Ley de Plazos del aborto, y de grupos económicos, con la anulación del programa contra el alcoholismo.



Fuente: diagonal.net / MANUEL MARTÍN, secretario de FADSP (Federación de Asociaciones por la Defensa de una Sanidad Pública).

jueves, 14 de febrero de 2008

HUELGA GENERAL



Como acto solidario con los compañeros vascos, este blog no publicará nada ...
... hoy estamos de ...


HUELGA



... para defender derechos básicos y soluciones democráticas al conflicto ...
... para luchar contra la represión y el fascismo ...


martes, 12 de febrero de 2008

Creció la tarta, pero el reparto fue a menos

Iba a ser una bandera del PSOE en esta campaña, pero poco antes de las elecciones la situación económica se ha convertido en una baza de la oposición. El motivo: a pesar de años de crecimiento sostenido, las clases populares perdieron poder adquisitivo.

Que las palabras Socialista y Obrero guardan poca relación con el PSOE era algo sabido antes de la llegada de Zapatero a la presidencia, pero aún así, en estos años el Gobierno hizo lo posible para evitar cualquier posible confusión. Marcado por el superávit fiscal y el ahorro en gastos sociales, en este tiempo las 20 mayores fortunas españolas multiplicaron por cuatro su valor en bolsa y las grandes empresas encadenaron récords de beneficios, mientras los salarios perdieron poder adquisitivo y alcanzó el 60% el número de hogares con dificultades para llegar a fin de mes.


PRECARIEDAD LABORAL Y SINDICAL Empleo de escasa calidad y ‘pacto social’ La precariedad y la alta temporalidad, que afecta a cerca del 90% de los nuevos contratos, fueron la constante en el campo del empleo. Para su campaña, el Gobierno presume de haber creado tres millones de puestos más. Esto no significa, sin embargo, que tres millones de personas desempleadas se hayan incorporado al mercado. De media, un mismo trabajador temporal podía tener cinco contratos al año. Pese a ello, y al margen de honrosas excepciones, la movilización laboral brilló por su ausencia. El llamado ‘pacto social’ entre Gobierno, patronal y sindicatos se concretó en la negociación de los acuerdos colectivos y especialmente en la reforma laboral de 2007.


ENERGÍA: UN FACTOR ESTRATÉGICO

El culebrón de la OPA a Endesa En septiembre de 2005, Gas Natural (cuyo accionista mayoritario es La Caixa) anunciaba una OPA sobre Endesa (participada mayoritariamente por Caja Madrid). El entonces presidente de Endesa y hoy cabeza económica del PP, Manuel Pizarro, anunció su oposición, mientras que poco después, la alemana E.ON anunciaba otra OPA sobre Endesa. El PP acusó al Gobierno de dejar el suministro eléctrico en manos del Gobierno de Cataluña, y el PSOE acusó al PP de preferir una empresa alemana antes que una catalana. Mientras, la Comisión Europea estudió el caso para evitar violaciones en las leyes de competencia. Finalmente, no prosperó ninguna de las dos ofertas y Acciona, junto con la eléctrica italiana Enel, llegó a un acuerdo para la compra de Endesa, quedando su capital mayoritariamente repartido entre las dos.


ESTALLA LA BURBUJA

Crash de la bolsa - El ladrillo toca techo A finales del verano de 2007 los mercados financieros eran sacudidos por el terremoto subprime: las entidades crediticias en EE UU habían concedido créditos hipotecarios a clientes con poca solvencia. La titularidad sobre esos créditos se repartió en paquetes formados por diversos productos financieros, lo que hacía imposible averiguar qué entidades de crédito podían incurrir en pérdidas, ante casos de impago. El resultado, en un mercado que se basa en la confianza, es que los bancos dejaron de prestarse dinero entre sí, y a los consumidores, provocando una crisis de liquidez: teniendo suficientes activos, podría darse el caso de que al intentar retirar una suma importante, el banco no dispusiese de efectivo. Para evitarlo, los bancos centrales inyectaron cientos de miles de millones de euros al sistema bancario, provocando con ello un alza en los precios, por la sobre-oferta de dinero.


LEY DE DEPENDENCIA ¿Medida social o negocio con los cuidados? El 30 de noviembre de 2006, el Parlamento aprobaba con una amplia mayoría la medida estrella de Zapatero para dar apoyo a las situaciones de dependencia. El proyecto, de gran envergadura presupuestaria, lleva aparejada, además, la creación de un importante número de puestos de trabajo. Llega en un contexto de luchas laborales en el sector social que, por fin, ha conseguido aprobar un convenio colectivo estatal que raramente se aplica. Mientras, para los puestos de trabajo menos cualificados ya está previsto que los dos sindicatos que han negociado la Ley con el Gobierno impartan lucrativos cursos de formación. Más se frotan las manos las grandes empresas de servicios que ven como se abren ante sus ojos grandes posibilidades de obtener suculentos contratos con las administraciones públicas que no estén preparadas para ofrecer los servicios que la Ley de Dependencia reconoce como derechos irrenunciables. Y quienes no puedan afrontar su parte del pago de las prestaciones encontrarán la nueva posibilidad de suscribir una hipoteca inversa con la banca, que no se queda sin su parte del pastel.


AVERÍAS A UN PASO DE LAS URNAS Malos datos en la recta final del PSOE “El mejor año económico de la democracia”. Éste fue el balance que hizo de 2006 el presidente Zapatero ante los principales accionistas en la Bolsa de Madrid. En ese momento las empresas sumaban 12 trimestres seguidos de ganancias. En términos brutos, la economía creció, pero el maná macroeconómico no se notó a pie de calle. En la recta final de la legislatura, el parón en la actividad inmobiliaria y el ascenso de precios frustró la intención del PSOE de presumir sobre la situación económica en su campaña. Entrados en 2008, el repunte del paro y el aumento del precio de los bienes de primera necesidad llevaron a que, pese al crecimiento del PIB, un 45% de la población califique como mala o muy mala la situación económica. Todo esto fue aprovechado por el PP, donde ahora es posible escuchar a Pizarro (quien se llevó 13 millones de euros al dejar Endesa) preocuparse por los altos precios de la lista de la compra.


Fuente: A. Álvarez, F. Barrendero, M.d.L. / diagonal.net

lunes, 11 de febrero de 2008

Zapatero cambia los muebles de sitio

La explosión en el número de asalariados y la disponibilidad de dinero barato para el endeudamiento han permitido al Gobierno de Zapatero tapar algunos de los agujeros sociales abiertos en la etapa de Aznar. El Ejecutivo confía en continuar este modelo en la próxima legislatura mediante un mayor gasto público en infraestructuras y nuevos servicios sociales, a la vez que proyecta más recortes de impuestos tanto a los asalariados como a los empresarios. La escasa respuesta social y sindical a un programa basado en la desprotección y en los bajos salarios despeja el camino a este pariente pobre del milagro económico.

Debe resultar difícil promocionar un cambio tranquilo en un país cuyas estructuras demográficas y productivas sufren un terremoto. En la hacienda heredada por José Luis Rodríguez Zapatero el número de mujeres reclutadas para el trabajo asalariado era un millón y medio inferior al actual, la afiliación extranjera a la Seguridad Social apenas rebasaba el millón de cotizantes (hoy acaricia los dos millones) y el euribor volvía sólo un 2% más pobres a quienes tenían que revisar su hipoteca (ahora se debate en el 4,4%). Estas variables desentrañan la principal característica del milagro económico español: cómo el consumo privado (empresas y hogares) ha sido el motor de la economía en el único país de la OCDE donde la capacidad adquisitiva de los salarios se ha reducido en los últimos diez años.

El mérito del Gobierno ha consistido en presentar este cambio de escala de la economía española como el resultado de una prudente y equilibrada visión macroeconómica. El verdadero milagro se ha obrado en el plano político y social. ZP ha logrado que la oposición de izquierda apoyara los duodécimos Presupuestos Generales del Estado (PGE) del Gobierno de Aznar. ¿Exageraciones? En el caso de los PGE de 2008, tan sólo dos meses separan la enmienda a la totalidad presentada por el grupo parlamentario de Izquierda Verde (IU con ICV) de su aprobación navideña a las cuentas del vicepresidente económico Pedro Solbes.

El milagro de la concertación

Fuera del Parlamento, CC OO y UGT han mantenido su fidelidad al diálogo social, herencia de los años del PP y de los celebrados Pactos de la Moncloa. Nada ha quedado fuera del consenso: leyes de dependencia e igualdad, cupos de entrada de trabajadores inmigrantes, subidas del salario mínimo y de las pensiones. Y los acuerdos salariales que, allí donde estos sindicatos tienen capacidad de negociación, se limitan a confiar en que las cláusulas de revisión compensen la pérdida de poder adquisitivo provocada por el descontrol de precios. Con un crecimiento económico menos fuerte y con menos inflación, la IG Metall alemana está proponiendo subidas salariales de hasta el 8%. “Somos el partido que más se parece a España”. La frase, marcada a hierro en el libro de estilo de Zapatero, resume la fe del Gobierno en que el actual clima de paz social se prorrogue. Pero más allá del sector inmobiliario, los primeros síntomas de alarma se extienden a la matriculación de coches, que cayó un 22% en las tres primeras semanas de enero, y a la recaudación del IVA (que ya crece por debajo del PIB).

Las medidas presentadas por el PSOE en el escaparate electoral repiten el esquema de la actual legislatura, con un acento más marcado en las políticas llamadas anticíclicas, que compensan la debilidad del consumo privado mediante un aumento del gasto público o mediante una reducción de impuestos. Pero atrapado entre dos opciones obviamente contrapuestas, el gusto gubernamental por la improvisación empieza a resultar evidente. Hace sólo un mes un miembro del equipo de Solbes descartaba a DIAGONAL que el programa electoral del PSOE incluyera medidas fiscales de peso; hoy se sabe que el cheque- regalo de 400 euros restará 5.000 millones de euros anuales a las cuentas públicas. Esta cantidad equivale al límite de gasto de las Administración Central del Estado, fijado por la Ley de Estabilidad Presupuestaria (del PSOE, con apoyo nuevamente de Izquierda Verde) en un 0,3% del PIB.

Con total desparpajo, el ministro de Trabajo, Jesús Caldera, explicaba en el programa La Ventana de la cadena SER el sentido último de la medida: facilitar el pago de la hipoteca a las familias (sic) presionadas por el aumento de los tipos de interés. Caldera también ha confiado en los efectos del Plan Estratégico de Infraestructuras y en la Ley de Dependencia para mantener el tirón del empleo en las dos patas que llevan sustentándolo en 15 años de milagro económico: el trabajo masculinizado en las obras y el trabajo feminizado, con o sin salario, en los cuidados y los servicios a las empresas. Mientras el cuerpo aguante. Los datos de la Encuesta de Población Activa muestran, en el último trimestre de 2007, descensos del 20% en el empleo en la construcción. Y la afiliación de extranjeros a la Seguridad Social (incluido el régimen de autónomos) no deja de bajar desde su máximo histórico (más de dos millones de altas) hace sólo siete meses, en junio de 2007.


Fuente: Diego Sanz Paratcha / diagonal.net

domingo, 10 de febrero de 2008

Zapatero: “Un ansia infinita de paz”

CONSTITUCIÓN EUROPEA (I) Ramón Fdez. Durán (Ecologistas en Acción)

El Gobierno español fue el primero en aprobar en referéndum la Constitución, en la consulta con más baja participación de la democracia española (42%). Pero a pesar del 77% de ‘síes’, sólo algo más de tres de cada diez ciudadanos apoyaron la Constitución. Eso fue celebrado como un gran triunfo para Europa y para la democracia española. Ahora asistiremos a la modificación en toda regla de la máxima expresión de la soberanía popular, pues el Gobierno español someterá el nuevo Tratado a ratificación en el Parlamento, pasándose por el forro lo que había sido, según ellos, la expresión de voluntad popular. El referéndum del poder sirvió para impulsar un debate sobre el “proyecto europeo”, y la futura y subrepticia ratificación parlamentaria debe ser utilizada para profundizar el debate en torno a esta Europa que está condicionando tanto nuestras vidas. El mito de Europa que existía hasta ahora en nuestro territorio hace tiempo que estaba entrando en crisis, y saltó en gran medida por los aires tras el ‘no’ francés y holandés. Es hora pues de profundizar en este debate, exigiendo un no deseado referéndum, y animar las resistencias a la Europa del capital

CONSTITUCIÓN EUROPEA (II)
Carlos Taibo (escritor y profesor de la UAM)

El Gobierno español no dudó, a principios de 2005, en apoyar sin cautelas un tratado constitucional, el de la UE, que respondía al propósito de otorgarle un marchamo legal al desorden neoliberal imperante. Llamativamente, se desmarcó por completo de las críticas que el tratado suscitó, por ejemplo, entre muchos de los socialdemócratas escandinavos, conscientes de cómo el texto cortaba las alas al horizonte de un Estado intervencionista que garantizase el vigor de derechos sociales y atendiese a los más desfavorecidos. Tampoco parece que el Gobierno español apreciase problema alguno en la ratificación de una relación de sumisión con EE UU, evidente en un texto en el que no faltaban los espasmos militaristas. El referendo convocado en febrero de 2005 fue, en suma, una genuina ceremonia de la confusión en la que las autoridades españolas esquivaron cualquier debate serio. Han actuado de la misma manera cuando, en noviembre de 2007, se ha aprobado en Lisboa un minitratado –en esencia es el mismo texto rechazado por la mayoría de los ciudadanos franceses y holandeses–, sin que en este caso, y para evitar riesgos, se vaya a organizar entre nosotros referendo alguno.

GASTOS MILITARES Y DEFENSA Pere Ortega (Centre Delás d’Estudios por la Paz)

Si se observan los presupuestos de defensa durante esta legislatura, éstos han aumentado entre el 5% y el 6%, incremento superior al IPC anual. Los derivados de la I+D militar dedicados a nuevos armamentos este año 2008 han sido del 5%, pero en 2006 alcanzaron un 26%. Y en el apartado de inversiones militares aún resultan más alarmantes, entre el 27% y 64% según los años. Es decir, el Estado español respecto a cuestiones militares vive instalado en una deriva del gasto militar que lo sitúa en el 1,7% del PIB, muy por encima de lo que indican los presupuestos del Estado y los anuarios internacionales. Esto es así porque el gasto militar se encuentra camuflado entre diversos ministerios. Otro parámetro para evaluar la deriva militar son las exportaciones de armas, éstas alcanzaron la cifra de 845 millones euros en 2006 frente a los 419 millones de 2005, que sitúan a España en el octavo lugar del ránking mundial en venta de armamentos. La presencia de fuerzas militares en el exterior ha ido aumentando año tras año, hasta situarse en los 2.815 efectivos actuales con un coste que rondará los 500 millones de euros.

AMÉRICA LATINA Pascual Serrano (periodista)

El Gobierno ha jugado una vez más a nadar y guardar la ropa. Por ejemplo, cuando Zapatero salió en defensa de Aznar respondiendo a Chávez en la Cumbre de Santiago, nadie del Gobierno, del ministerio, ni del PSOE se quiso acordar de los telegramas clasificados que envió la embajada española en Caracas cuando el golpe y que demostraban la implicación de nuestro Gobierno, a pesar de que fue el propio Moratinos quien lo hizo público en su comparecencia parlamentaria. También fue un acto de injerencia decir que nuestro Gobierno estaba “preocupado” (Trinidad Jiménez dixit) por la no renovación de la licencia de emisión a una empresa de televisión en Venezuela. Eso ha sucedido en decenas de ocasiones en todos los países, ¿desde cuándo nuestro Gobierno muestra su preocupación o tranquilidad para la distribución de las licencias para el uso del espacio radioeléctrico en otros gobiernos?

AMÉRICA LATINA (II) Pedro Ramiro (Observatorio de Multinacionales en América Latina

Para analizar las relaciones entre el Gobierno de Zapatero y los ejecutivos de América Latina, hay que tener en cuenta que “lo que está pasando en la región no se entendería sin la presencia de la empresa española, como no se puede imaginar el Santander sin América Latina”, tal y como afirma el director general de este banco. Por lo tanto, desde el punto de vista de la defensa de los intereses del capital de origen español, el Gobierno ha mantenido relaciones entre buenas y excelentes con los mandatarios de los seis países en los que se concentra el 92% de la IED española: Brasil, Argentina, México, Chile, Colombia y Perú. Sin embargo, las relaciones con Venezuela, Bolivia y Ecuador, cuyos gobernantes han tratado de modificar, en mayor o menor medida, las condiciones en que operan las multinacionales españolas, no han sido tan cordiales. Basta recordar la que se armó en la Cumbre de Santiago de Chile. Actualmente, una gran parte de los ingresos de las mayores multinacionales españolas provienen de sus actividades en América Latina. Y es que en aquella región son líderes en sus respectivos sectores: Repsol-YPF es la primera petrolera; Telefónica lidera las telecomunicaciones; Endesa domina el mercado de la electricidad; el Santander y el BBVA son los dos mayores bancos. Esta situación obedece al apoyo que les han ido brindando los sucesivos gobiernos españoles. Incluido el de Zapatero, que no ha dudado en echar una mano a las multinacionales españolas que han tenido problemas: para proteger los intereses de Repsol en Bolivia, el secretario de Estado de Asuntos Exteriores viajó allí unos días después de que se promulgase el decreto de nacionalización de los hidrocarburos; para defender los negocios de la papelera española ENCE, el rey Juan Carlos actuó como mediador en el conflicto diplomático entre Argentina y Uruguay; y en el caso de Unión Fenosa en Nicaragua, según denunció Daniel Ortega, la embajada española presionó para favorecer a esta multinacional.

MULTINACIONALES David Llistar (Observatorio de la Deuda en la Globalización)

El Gobierno del PSOE se ha distinguido del anterior principalmente por las formas, que no por sus objetivos, unas relaciones internacionales orientadas a la internacionalización de la empresa española. En los esfuerzos del Gobierno socialista por contar con ‘campeones nacionales’ en todo el mundo, se ha mostrado una cara amable, dialogante, europeísta y acompañada de cooperación, para conquistar los mercados que antes se lograban por canales más duros y bajo una alianza estratégica con la geoestrategia de Bush y Blair. Destacamos por ejemplo el Plan África, donde se intercambian ayuda e inversiones (principalmente en hidrocarburos y pesca) por control migratorio y concesiones. En el plano de la regulación, destaca en esta legislatura la aprobación de tres leyes con capacidad de poner límites a las transnacionales (Ley de Responsabilidad Corporativa, Ley de Deuda y Ley de Responsabilidad Ambiental) que terminaron siendo descafeinadas ante la posibilidad de que perjudicaran a las transnacionales españolas ante la competencia internacional. Sin embargo, la legislatura del PSOE coincide, por un lado, con distintos procesos de nacionalización de empresas antes privadas (Venezuela, Bolivia, Argelia, Ecuador, Argentina...) que provocan conflictos bilaterales donde se buscan procesos de arbitraje internacionales, y por el otro, la expansión de las transnacionales españolas deja de proyectarse hacia Latinoamérica y lo hace sobre todo en Europa y Estados Unidos, y en menor medida en China y los países emergentes latinoamericanos.

INTERVENCIONES MILITARES Carlos Taibo (Escritor y profesor de la UAM)

La legislatura iniciada en 2004 empezó bien: el Gobierno español decidió retirar con urgencia los soldados presentes en Iraq. Pronto se hizo evidente que ésa era, con todo, la única noticia saludable: al cabo de unos meses muchos de esos soldados —es una forma de hablar— reaparecieron en Afganistán, a buen seguro para permitir que cicatrizasen las heridas que la retirada de Iraq había generado en la relación bilateral con Estados Unidos, y al servicio ahora —por mucho que el gobierno de Rodríguez Zapatero se empeñe en negarlo— de otra operación imperial norteamericana. En el verano de 2006, y para cerrar el círculo, España acudió presurosa a permitir que la enésima razzia militar israelí, ahora en el Líbano, se cerrase sin sanción alguna con el despliegue de una legitimatoria fuerza internacional de interposición. Importa mucho subrayar que, así las cosas, España no ha roto una atávica relación de sumisión con EEUU. Ahí están, para testimoniarlo, las bases de Morón y de Rota, el pleno vigor de los convenios de defensa hispanonorteamericanos y la dócil aceptación de las órdenes que llegan de la OTAN.

Fuente: diagonal.net

sábado, 9 de febrero de 2008

Política exterior del PSOE: el poder de la magia

Como es sabido, los prestidigitadores ejecutan una serie de pases mágicos –enormes garabatos en el aire– para ocultar y al mismo tiempo anunciar, por debajo de nuestro campo de visión, el cambio rapidísimo que arrancará nuestros aplausos. Sólo un reduccionismo demagógico puede negar la discontinuidad de la política exterior de Zapatero respecto de la de su predecesor en el Gobierno, pero sólo la ingenuidad interesada de un tifoso podría dejar de percibir que esta discontinuidad tiene que ver sobre todo con la pompa de la magia. En este terreno, como en otros, no se sabe qué asombra más, si la prometedora y excitante teatralidad de los pases de mano del PSOE o el hecho de descubrir, al inclinar la mirada, que todo sigue igual.

No desdeñemos esta magia como simplemente retórica o tramposa; hace falta mucho menos poder taumatúrgico para transformar un pañuelo que para transformar a los espectadores (que es lo que hacen en realidad los magos), y lo cierto es que los pases grandilocuentes del PSOE, que mantienen inalterado el Gobierno, han cambiado radicalmente –oh– a los gobernados: de las movilizaciones populares contra la guerra que estuvieron en el origen del vuelco electoral del 14-M, cuatro años después no queda nada. La diferencia entre el PP y el PSOE, por tanto, no es sólo formal, salvo que aceptemos que las formas (el llamado “talante”) son precisamente las que determinan las respuestas del público frente al escenario; la diferencia muy material y mensurable entre la política exterior del PP y la del PSOE es que la del primero generaba protestas y movilizaciones y la del segundo no. Hay magos que consiguen hacer desaparecer un conejo dentro de un sombrero mientras el público aplaude; el PSOE, mucho más eficaz, ha hecho desaparecer al público mismo cuando empezaba a alborotar.

Por debajo del vuelo de las manos, la política exterior del PSOE en los últimos cuatro años no ha hecho sino embragar los dos ejes centrales del anterior Gobierno: claudicación ante EE UU en el marco de la ‘guerra contra el terrorismo’ y defensa a ultranza de los intereses de las empresas españolas. La retirada de las tropas de Iraq fue el gesto de ruptura temprano y espectacular que exigió luego –o permitió, según atribuyamos mayor o menor complacencia a Zapatero– una colaboración aumentada, aunque más discreta, en la guerra mundial contra la justicia encabezada por EE UU. En agosto de 2004 el Gobierno aumentó el número de soldados españoles desplazados al Afganistán ocupado, y en junio del 2005 involucró a España en misiones desnudamente militares al aceptar la gestión de la base de Herat, todo ello al servicio de los intereses estadounidenses en la zona y contra la voluntad de la población. A finales del mismo 2004, el Gobierno de Zapatero mandó también 200 soldados a Haití para apoyar, bajo el paraguas de la ONU, el golpe de Estado franco-estadounidense contra el presidente Aristide. Desde septiembre de 2006, 1.100 militares españoles operan asimismo en el sur del Líbano en una misión concebida para proteger al agresor israelí y controlar y desarmar la legítima resistencia de Hezbolá. Al mismo tiempo, el Gobierno del PSOE ha continuado su colaboración con los EE UU en Iraq a través de sus servicios secretos y mediante la formación en España de cuadros militares, policiales y diplomáticos de la Administración colaboracionista iraquí. Invocar la letra de la “legalidad internacional” en estos casos sólo contribuye a dañar aún más su espíritu, muy degradado ya a los ojos de quienes deberían sentirse protegidos por él; y oculta, además, la violación abierta de esa legalidad en otros escenarios. Basta pensar en los 25 ‘vuelos de la CIA’ –tres más que bajo el gobierno Aznar– consentidos por el PSOE desde el año 2004 o en el apoyo incondicional de Zapatero al actual plusmarquista mundial de cortes de manga a las Naciones Unidas, Israel, al que recompensamos generosamente por cada palestino encarcelado, torturado o asesinado, tal y como orgullosamente confesó el ministro Moratinos el pasado mes de noviembre: “Nuestro compromiso en favor de Israel es absoluto y total”.

La visita de Condoleeza Rice a Madrid en mayo de 2007 rubricó la “reconciliación” entre el PSOE y EEUU y restauró un nuevo espíritu de colaboración también en la díscola Latinoamérica. El consenso de una política común frente a Cuba y Venezuela y en sostén de la dictadura colombiana se explica asimismo por la creciente recolonización económica española del “patio de atrás” estadounidense. La política del Gobierno Zapatero en Latinoamérica, en efecto, ha girado en torno a la defensa de los intereses de las empresas españolas, a despecho del perjuicio ocasionado a las poblaciones locales o incluso de los delitos cometidos, y esto según el principio expresado por el propio Moratinos el 10 de marzo de 2006 en el marco del contencioso entre Repsol y el Gobierno de Evo Morales: “No podemos aceptar que la imagen de una compañía española se vea afectada por este tipo de actitudes”. Más allá de los modales y los exabruptos, la polémica clausura de la reciente Cumbre Iberoamericana de Chile dejó clara la convergencia de intereses entre PP, PSOE y la corona española: los beneficios de Repsol, Unión Fenosa, Iberdrola, Banco de Santander, BBVA, etc., están por encima de los DD HH y de la rivalidad entre los partidos.

Añadamos a este cuadro la iniciativa que, desde mayo de 2006 y mediante el llamado Plan África, asocia la cooperación económica y militar en el continente africano a la contención de la inmigración. Los acuerdos con Senegal, Mauritania, Marruecos y Libia señalan hasta qué punto las relaciones españolas –y europeas– con nuestros empobrecidos vecinos pivotan en torno a la gestión a larga distancia y sin mancharse las manos del nuevo tráfico ‘negrero’. Se necesitaba toda la magia del prestidigitador para transformar al ciudadano sin transformar la política. El gran pase de manos que anuncia y desmiente la discontinuidad –entre el PSOE y el PP– se resume en la iniciativa astral de la política exterior de Zapatero: esa “alianza de civilizaciones” que conserva el fraudulento y teológico concepto de “civilización” como marco de explicación (para no tener que abordar las causas políticas y económicas de los conflictos) y que quiere hacer creer que cree que los pueblos masacrados aceptarán mejor los bombardeos y los saqueos si se los explicamos bien y deshacemos con buenas palabras la “ilusión” de su dolor y de su miseria. Y si encomendamos esta labor de hipnosis –claro– a los mismos dictadores aliados por mediación de los cuales privamos a medio mundo del derecho a una vida digna –cuando no de una vida a secas.


Fuente: diagonal.net / Santiago Alba Rico (escritor)

viernes, 8 de febrero de 2008

El “cambio tranquilo”, ni cambio, ni tranquilo

No seas él es el nombre del último vídeo electoral lanzado por el PSOE. Como otras veces, el argumento para su electorado se centra en una idea simple: que no es el PP. La idea no deja de ser llamativa, especialmente si se tiene en cuenta que las últimas medidas del Gobierno (negativa en la reforma de la Ley del Aborto, ilegalización de ANV y PCTV, promesas de no reabrir un proceso de negociación o rebajas fiscales) se encuentran antes destinadas a contentar al electorado de derechas que a marcar distancias. Una desalentadora llegada a meta en la que al PSOE sólo le faltó pedir perdón.

Con la experiencia de los estrechos márgenes en los que se mueve la política parlamentaria, y teniendo en cuenta el servilismo del poder político respecto al económico, cabe albergar más bien poca confianza en cualquier gobierno. La apuesta de DIAGONAL pasa por fomentar otro tipo de acción política, la que nace desde abajo, desde los movimientos sociales, con vistas a crear un modelo de sociedad diferente. Ahora bien, esto no significa que perdamos de vista lo que ha sido la acción de gobierno. A este fin, el de repasar lo que ha supuesto la presente legislatura, es a lo que se dedica el número que tienes entre manos. En las diferentes secciones del periódico se ha reservado un espacio dirigido a observar las políticas de estos años.

Tras el cuatrienio negro de la última legislatura del PP (el del Prestige, Iraq, el 11-M y la manipulación informativa), Zapatero lo tenía fácil para caer simpático: bastaba no ser Aznar. Además, hubo algunos cambios. Se produjo el regreso de las tropas de Iraq. Y también se aprobó la Ley contra la Violencia de Género y la Ley de Igualdad entre hombres y mujeres. Un arranque con sorpresas, pero que ya mostraban un denominador común: mínimo coste económico y máxima rentabilidad social. A esto solía acompañar otra práctica: nombres ampulosos que apenas se concretaron. Fue el caso de la Alianza de Civilizaciones o la decepcionante Ley de Memoria Histórica.

Aperturista en hábitos sociales,( con el ejemplo del matrimonio entre personas del mismo sexo), el continuismo se mantuvo en cuestiones de fondo (la principal, el rumbo neoliberal de Solbes, con el ladrillo como motor económico que acaba gripando poco antes de las elecciones).

En este tiempo, el Gobierno de Zapatero se encargó de enterrar las ilusiones que alentó entre la sociedad. En este sentido, el punto negro de la legislatura fue el proceso de paz. Pocas veces antes habían existido tantas esperanzas de ver el fin del conflicto armado, pero pocas veces se dieron menos pasos para impulsar dicho proceso. Con el estribillo de “comprobar la realidad del alto el fuego”, pasaron más de ocho meses (en los que se presumió incluso de acercar menos presos que el PP), hasta que estalló el coche bomba en el aeropuerto de Barajas, donde murieron dos trabajadores ecuatorianos.

Una decepción semejante se vivió con el debate territorial. Asuntos como el Estatut catalán evidenciaron la aversión a cuestionar la estructura del Estado. Y si en un comienzo el Gobierno acuñaba el discurso de “la España plural” acabó por dar un giro de 180 grados, hasta llegar al punto de poner Navarra en manos de la derecha antes de atreverse a pactar con Nafarroa Bai.

Vistos los titubeos del PSOE, la derecha política no dudó en mantener una apocalíptica campaña de acoso y derribo que ha acabado por dar alas a los sectores más nostálgicos y reaccionarios de la sociedad española, ya fuera a través de la Asociación Víctimas del Terrorismo o por medio de la jerarquía eclesiástica, fomentando de paso el auge de grupos de extrema derecha. Al final, con una agenda que parece dirigida desde la oposición, la fotografía muestra una acción de gobierno que, o bien mantuvo el piloto automático del PP, o bien optó por dar media vuelta tras los atrevimientos iniciales (como ilustró el aumento de tropas a Afganistán, los sonrojantes intentos de hablar con Bush o la complicidad con los vuelos de la CIA). Lo resume mejor Santiago Alba Rico: “No se sabe qué asombra más, si la prometedora y excitante teatralidad de los pases de mano del PSOE o el hecho de descubrir, al inclinar la mirada, que todo sigue igual”.


Fuente: Diagonal.net

jueves, 7 de febrero de 2008

De como Zapatero financia a la Iglesia católica


Hasta hoy la Iglesia ha sido incapaz de cumplir el acuerdo suscrito en 1.987 para financiarse con la entrega del 0´5% de la cuota del IRPF de los contribuyentes que lo deseen.

Como resultado de los acuerdos de 1.979 con la Santa Sede en 1.980 el Estado Español, con el gobierno de Adolfo Suárez, entregó a la Iglesia una suma equivalente a 44´83 millones de euros.

En 1.990, con el gobierno de Felipe González, la cantidad entregada a la Iglesia ascendió a casi el doble: 85´69 millones de euros.

En el año 2.000, con el gobierno de José María Aznar, la cantidad entregada a la Iglesia Católica fue de 128´1 millones de euros.

En 2.006 ha sido de 144´24 millones de euros, y en 2.007 será de 150´01 millones de euros, por la reciente revisión al alza del porcentaje de IRPF entregado por el gobierno de Rodríguez Zapatero, que ha pasado a ser el 0´7%, aunque los obispos reclamaban el 0´8%.

Pero eso con ser ya mucho no es todo.

Según el Ministerio de Hacienda la Conferencia Episcopal y la Iglesia perciben mucho más: 150 millones de euros de la dotación de IRPF; 3.200 millones de euros en subvenciones a colegios concertados; 517 millones para sueldos de profesor de religión; 90 millones a organizaciones sociales; 60 millones a hospitales e instituciones de beneficiencia; 30 millones a capellanías castrenses en cárceles y cuarteles; 200 millones para el patrimonio inmobiliario y artístico; 60 millones para otras actuaciones en el ámbito urbano. A esto hay que añadir unos 750 millones de euros de ahorro por desembolsos fiscales no realizados. Tenemos que LA IGLESIA CATÓLICA PERCIBE ANUALMENTE UNA SUMA QUE RONDA LOS 5.000 MILLONES DE EUROS, CIFRA ELEVADÍSIMA LIBRE DE IMPUESTOS DADO QUE LA IGLESIA FINANCIERAMENTE ACTÚA COMO PARAÍSO FISCAL.

LA SITUACIÓN DE OTRAS CONFESIONES RELIGIOSAS

La fe católica en España no es la única, sino la mayoritaria. Hay más de tres millones de creyentes no católicos: según el Ministerio de Justicia están inscritas 1.293 entidades evangélicas, 406 musulmanas, 18 judías y 13 ortodoxas que aglutinan a 1.200.000 cristianos evangélicos, 125.000 testigos de Jehová, 50.000 mormones, 48.000 judíos, 600.000 ortodoxos, y 1.080.000 musulmanes, además de otras creencias más minoritarias como el budismo, el bahazismo y el hinduismo.

Según diversos estudios consultados el 74´1% de los españoles se declara católico y el 23´4% declara que no profesa ningún credo, son ateos, agnósticos o no contestan.

Es una vergüenza y una tomadura de pelo que Zapatero trate de engañar a la opinión pública y al electorado con una pelea de boquilla, artificial, con la cúpula de la Iglesia española haciendo pasar lo que es teatro por un enfrentamiento real. Bajo el mandato de Zapatero la Iglesia ha recibido más dinero que nunca, ni con Aznar, ni con Felipe González, ni con Adolfo Suárez, recibió tantos recursos económicos.

Existe un concordato preconstitucional que el PSOE no piensa denunciar. Zapatero en la práctica sitúa el debate en el terreno moral y no pone sobre la mesa los temas presupuestarios y la separación de la Iglesia del Estado, luego estamos ante un debate con truco, fraudulento, típico del doble discurso tan del PSOE, tan de Zapatero, del felipismo, de los Bonos y compañía.

Izquierda Unida respeta y admira el compromiso de los cristianos de base y la labor social abnegada y sacrificada de sectores de la Iglesia, pero no comparte en absoluto el discurso reaccionario de la cúpula de la Iglesia. Los cardenales y los obispos no son coherentes con los Evangelios de la propia Iglesia, hay mucha distancia entre el hecho de que Jesucristo entrara en Jerusalén con una burra prestada y que la Conferencia Episcopal española se embolse más de 5.000 euros de dinero público de todos los españoles y españolas. Es llamativo que sólo se tolere los divorcios cuando los bendice la Iglesia o cuando lo hacen familias de la derecha como una prolongación de la separación de bienes y no cuando lo hacen las familias trabajadoras. Llama la atención que no pusieran el grito en el cielo cuando las hijas de papá que tenían dinero iban a Londres a abortar en avión y ahora jaleen a la Guardia Civil de Rubalcaba para que interrogue a las mujeres que han abortado en Madrid y en Barcelona. Es una pasada que se indemnice con dinero de la Iglesia a las víctimas de abusos sexuales en Estados Unidos y no se reconozca el derecho de dos personas adultas del mismo sexo a contraer matrimonio. Se riza el rizo cuando con el gobierno del PP se envía un obispo de intermediario a negociar con ETA y ahora se criminaliza al gobierno cuando lo intenta, sin nombrar la responsabilidad de la Iglesia Católica en los orígenes del fenómeno de la violencia en el País Vasco.

Y como aviso a navegantes, no crean ni en la sinceridad ni en la coherencia de los obispos ni en la sinceridad ni en la coherencia de Rodríguez Zapatero, unos con la excusa de pescar almas están pescando subvenciones y el otro con la excusa del enfrentamiento teatral con los obispos está pescando votos. No piquemos el anzuelo.

En resumen para IU, respeto total a las personas creyentes y defensa del Estado Laico y aconfesional como dice la Constitución.

Fuente: Rebelión / Antonio Romero Ruiz

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